domingo, 3 de marzo de 2013

Opinion sobre la voluntad general de Jean J. Rousseau

Cuando el nudo social empieza  a ceder y el estado a relajarse, cuando los intereses particulares empiezan a hacerse  sentir  y las pequeñas sociedades a influir en la grande, el interes comun se altera y encuentra oposicion; ya no hay unanimidad en los votos; la voluntad genedal ya no es la de todos; se escitan contradicciones y debates ; y el mejor parecer no se adopta sin disputas. 
En fin  cuando el estado, cerca a su ruina, subsiste solamente por una forma ilusoria y vana,  cuando el vinculo socialse rompe en todos los corazones, cuando el mas vil interés se adorna  con descaro con el nombre sagrado del bien publico, la voluntad general enmudece  entonces; guiados todos por motivos secretos, no opinan ya como  ciudadanos, sino como si jamas hubiese  existido el estado; y se hacen pasar falsamente con el nombre de leyes los inicuos decretos, que solo tienen por fin el interes particular.